Si hay una cosa que me molesta, es cuando la gente se te queda mirando. Durante mi estancia en España, esto ha sido algo que he tenido que lidiar con. Antes de venir, no sabía cómo iba a ser la gente; si iban a ser simpáticos, de mentes abiertas, desfavorables o descortés. Afortunadamente, mis encuentros con la mayoría de los españoles han sido de maravilla y no he tenido ningunas problemas con nadie. Solamente me parece ver una generación de gente en España que no ha ganado mi cariño y esos son los viejos, o las personas de mayor edad. No puedo hablar mal de toda la gente de edad mayor, porque sí he tenido el placer de conocer algunos que me han encantado, especialmente mi familia aquí en Madrid. Los que yo hablo son los viejos desconocidos que me juzguen en el metro y en las calles con sus miradas penetrantes.
Cuando estaba preparando mis maletas para venir a Madrid, empaque ropa adecuada para el verano caliente y española. Esto quiere decir que tengo muchos cortos, trajes y camisetas sin mangas. Yo no creo que me visto en una manera escandalosamente y nunca atraigo miradas en los Estados Unidos a causa de cómo me visto. Sin embargo, aquí en España, cada vez que me pongo unos cortos con una camiseta de mangas cortitas, tengo que sufrir las miradas de cada viejo y vieja que me pasa por el metro. A veces van tan lejos como mirarme de arriba abajo, como si con sus ojos me pueden cambiar de ropa. Aunque nunca he confrontado a alguien por esto, me gustaría saber por qué lo hacen; ¿Sera mi ropa muy reveladora? ¿Mis cortos revelan que no soy de este país y que en vez soy americana?
A lo mejor nunca voy a saber la respuesta y probablemente es un fenómeno que no va a parar pronto. Simplemente tengo que acordarme que España es un país predominantemente católico y que la gente de edades mayores tiende ser más conservativos que el resto de la sociedad. No es una justificación por sus miradas descortés, pero me parece la única explanación apropiada. Mientras tanto, sigo vistiéndome como me da gusto a mí y en una manera que no me sofoco por el calor madrileño que hace.
-Christine
Lo siento que recibas miradas hostiles cuando llevas la ropa que puede llevar en los Estados Unidos sin preocuparte. Como un chico, no recibí estas miradas hostiles pero pienso que es interesante que los viejos no aprueben de las ropas más “reveladoras” pero no hacen nada de todas las personas que besan y muestran su amor en los metros y las calles. Parece que si España en realidad es un país más conservador, los viejos no aprueban de las dos cosas.
ReplyDelete- Dan Chun
Yo me he dado cuenta esto también. Yo sé que algunos de mis cortos son muy cortos, pero en los Estados, son normales. En el metro, mucha gente, vieja y más joven, se me quedó mirando y es un poco extraño para mí.
ReplyDelete-Alexandra Paul
Yo también he padecido de las miradas severas de los viejos de Madrid. Se empeora por la noche o muy temprano por la mañana, cuando vuelvo de una noche divertida por el metro y me miran como si fuera una prostituta. No me visto de manera insinuante, siempre soy con clase, pero a los viejos parece que mostrar los tobillos es un pecado imperdonable!
ReplyDelete~Amy
También he tenido gente que me miran en el metro. Una vez había dos mujeres mayores que claramente quería que se sentara en el banco estaba en (y había mucho espacio) que me miraba con hostilidad por casi 2 minutos antes de que miraba a mí y pasaba por allí. No dejaban de mirarme con enojo todo el tiempo que estuvimos en el mismo tren. Fue una experiencia extraña. Quizás por eso?
ReplyDelete-Ruby