Thursday, June 23, 2011

La etiqueta y los perros : Interacción Social en Madrid


Era un día muy caluroso, y ya que mi estadía en Madrid se esta acordando, decidí de tomar ventaja de ello y salir fuera de la casa.

Había terminado de pasar las ultimas dos horas en el cuarto de mi hermanita anfitriona, bailando al compás de la música de Selena Gomez y Demi Lovato, ( quiero aclarar que mi hermana anfitriona tiene solo ocho anos de edad ).

Teresita y yo hemos tenido buen tiempo jugando en la casa, pero hoy yo quería sol. Despues de preguntar a mi hermana si quería ir conmigo a un paseo al Retiro, empacamos una bolsa grande con agua y otras delicias para nuestra caminata. Ella me sugirió de llevar nuestro perrito Trini, le pusimos la cuerda y ya listas a salir ella dice que debemos de llevar papel y lápices de colores para poder pintar en el Retiro, nuestra bolsa se puso mas pesada. El lugar es hermoso y todo el mundo toma fotos y demás, iba ella explicando eso. Al llegar al Retiro fue tan hermoso ver a familias haciendo cosas juntas, yo pienso que como familia nosotros no organizamos nada tan placentero como llegar a un parque y disfrutar de el todos juntos.

Un hombre mayor se acerco a nuestro lugar, y comenzó hablar de Trini, en un segundo mi instinto de hermana mayor despertó mi alarma, vi a Teresita actuar normal, yo mire al hombre de una manera causiota y me prepare a ponerme entre el y Teresita en caso que el quisiera secuestrarla. Talvez suena un poco disparatado pero de donde yo vengo los extraños no se acercan a niños jóvenes para hablar con ellos, definitivamente eso no pasa en mi país, si la gente se acerca hablarte se ve muy extraño. Para mi fue peor por estar sola con la niña ella era mi responsabilidad.

Obviamente nada paso, el hombre se retiro después de tratar de entablar una conversación amigable en la que yo no participe.

Durante la cena le pregunte a mi familia anfitriona si lo que había pasado era normal , ellos me dejaron saber su aprecio por cuidar de la niña pero al mismo tiempo rieron un poco y me explicaron que eso es normal cuando llevas un perro la gente hable contigo acerca del perro.

Otra vez me sentí avergonzada, pero la llave para entender la diferencia en las culturas se puede ver en el Retiro un lugar de interacción social donde todo el mundo comparte alegrías, donde toda la gente es mas abierta. Yo hubiera deseado saberlo antes para así poder responder a la amable charla que ese hombre trato de llevar a la que yo tan rudamente rechacé solamente por el poco conocimiento de la idiosincrasia del país.


-Stormie

1 comment:

  1. Para una persona como yo, quien no le gustan (o mejor dicho, tiene una fobia, jaja) los perros, vivir en Madrid es muy incómodo a veces. Los perros aqui suelen ser más pequeños sí, pero a mi me dan una rabia cuando los veo andando por todas partes.
    -Rayan Izzeldin

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