La Propina

Cuando nosotros comemos afuera en un restaurante en los Estados Unidos, una de las cosas más importante que necesitamos considerar es la propina. ¿Hizo el camarero un buen trabajo? ¿Nos trajo agua si necesitáramos o no nos prestó mucha atención? ¿Le damos diez por ciento de la cuenta o quince? Después de disfrutar (o no disfrutar) una comida en un restaurante, todas estas cosas requieren nuestra atención. Por eso, es siempre un poco pesado a ver al camarero que nos sirvió después de pagar el dinero. Si dimos bastante (o más) propina, el camarero usualmente nos da una sonrisa pero si dimos poco, es posible que recibamos una mirada hostil.

Por eso, estuve muy sorprendido cuando terminamos nuestra primera comida en un restaurante español sin los consejos de los profesores. Para darle una propina a nuestro camarero, sencillamente le dejamos las monedas que sobra después de pagar por nuestra comida. Como dimos una propina tan pequeña, anticipé que el camarero nos diera una mirada hostil pero él simplemente hizo adiós con la mano y nos dijo gracias. Desde esta experiencia y otras en cuando no dimos una propina suficiente (según nuestros estándares de los Estados Unidos), yo aprendía que no es descortés darle una propina pequeña.

Antes de llegar a España, yo pensaba que la propina era algo universal para expresar nuestra gratitud al camarero que nos sirvió. Además, en los Estados Unidos, muchos de los camareros en los restaurantes dependen en las propinas para ganar dinero suficiente porque los restaurantes les pagan un salario más bajo, anticipando que los clientes van a darles una propina. Por eso (y el hecho de que tengo muchos amigos que trabajan en restaurantes), siempre trato de darle una propina suficiente. Aunque era un poco difícil adaptar a la diferencia, he aceptado que los camareros españoles no van a enojarse si le doy una propina insuficiente según mis estándares.

- Dan Chun